Salud

Wifi, Móviles.......

Un escándalo sanitario a la vista

 

Por la doctora Sherrill Selman

 

Aunque los fabricantes y los gobiernos persisten en minimizar el impacto de las tecnologías inalámbricas sobre nuestra salud, las patologías, las cifras y los estudios están para denunciar todo lo contrario.  La radiación electromagnética de los teléfonos móviles, las antenas de telefonía y otros aparatos eléctricos alteran nuestro sistema hormonal, nuestros cambios intercelulares e incluso nuestro ADB mediante unos procesos hoy claramente identificados.

Hace más de diez años, escribí en NEXUS, mi primer artículo denunciando la prescripción desmesurada de hormonoterapia sustitutiva y de anticonceptivos orales.  Hoy en día, ya se conoce que esos medicamentos son responsables de ciertas patologías y de la muerte de numerosas mujeres en todo en mundo.  Todos estos años, he seguido investigando y he constatado la gran desinformación en torno al tema de la salud hormonal de las mujeres. Además he descubierto un potente perturbador endocrino: La Electro-polución y sus efectos desastrosos sobre los sistemas hormonales del hombre y las mujeres de hoy.

DE LA ELECTRICIDAD AL WIFI

1879, año en el que Thomas Edison, presento su primera lámpara eléctrica, marco un punto de inflexión.  El filamento incandescente de esta lámpara, ha literalmente revolucionado el mundo.  La era de la electricidad había nacido.  Imposible imaginar hoy, vivir sin esta fuente de energía,  por no hablar de los avances tecnológicos y de los aparatos que facilitan la vida, que ha engendrado.  Sin embargo, incluso ni el propio genio Edison habría podido preveer las inmensas consecuencias de su descubrimiento para la salud. 

Tendidos eléctricos, emisores, cables eléctricos y aparatos electrodomésticos que generan campos eléctricos y magnéticos, campos de fuerza invisibles alrededor de todo aparato eléctrico.  Nuestro amor por la electricidad, hace que estemos rodeados de ondas de energía, llamadas radiaciones electromagnéticas (REM), que se estiman de cien a doscientas millones de veces más importantes que hace cien años.

El problema se ha agravado por la explosión de la tecnología inalámbrica: Los teléfonos móviles, Bluetooth, PDA, Internet inalámbrico, Wifi, (en los aeropuertos, en los hoteles, en los ciber-cafés, en los colegios, etc.) las torres de telefonía emisoras de microondas necesarias para la transmisión.  Todo este universo inalámbrico omnipresente emite un espectro particular de radiación electromagnética, con efectos nefastos bien definidos sobre los sistemas vivos.

En apenas veinte años, la tecnología inalámbrica se ha impuesto en todo mundo.  Actualmente hay más de 236 millones de teléfonos móviles en los Estados Unidos, 20 millones en Canadá y 19 millones en Australia (más de 48 millones en Francia).  Por otra parte millones de torres de telefonía móvil, han surgido en el paisaje y millares de colectividades disponen de Wifi, o equipándose para disponer de ella.  En Estados Unidos y en Canadá, el nuevo de terminales Wifi,  ha pasado de 12.400 a finales de 2007 a 78.000 en lo que va de 2008.

En solo veinticinco años, la gran mayoría de la especie humana habrá estado expuesta a una dosis masiva de radiación electromagnética.  Nuestra homeóstasis está hoy siendo transformada por unas tasas sin precedentes de REM (de aspectos confusos), perturbando gravemente el funcionamiento de nuestro cuerpo.

 

LA AMENAZA DE LA ALTA TECNOLOGÍA (HIGH-TECH)

Cada vez mas estudios científicos reconocen que la mayor amenaza actual sobre nuestra salud y nuestro bienestar (y para todas las formas de vida), es una forma de polución insidiosa, invisible y omnipresente llamada “électro-polución”.  Numerosos problemas de salud han sido asociados a una exposición a las REM: diferentes canceres (particularmente de cerebro, de ojos, de oídos y de sangre),  abortos espontáneos, anomalías congénitas,  síndrome de fatiga crónica,  dolor de cabeza, stress crónico, nauseas y problemas cardiacos, autismo, dificultad para el aprendizaje, insomnio y enfermedad de Alzheimer.

Aunque pensemos lo contrario, el universo High-tech amenaza gravemente a nuestra salud.  El Doctor Robert Becker (autor de Cross Currents: El peligro de la Electro-polución, investigador especializado en radiaciones electromagnéticas y dos veces nominado al premio Nobel) se dice muy preocupado por la electro-polución: “Para mí, está claro que actualmente la fuente más grande de contaminación en nuestro medio ambiente es la proliferación de los campos  electromagnéticos.  A escala mundial, la considero más perjudicial que el calentamiento del planeta, o que el aumento de elementos químicos en el medio ambiente.

 

LA ANATOMIA DE LA ELECTRO-POLUCIÓN

Los 100 billones de células del cuerpo humano se comunican entre ellas por medio de señales electromagnéticas de baja frecuencia sutil, y de reacciones bioquímicas.  Estas vías de señalización transportan las informaciones que se traducen por los procesos bioquímicos y fisiológicos del cuerpo.  Una exposición continuada a la radiación electromagnética, puede considerablemente deformar y perturbar estas vías de comunicación celular, alterando el metabolismo celular y, a la larga, provocando la enfermedad.

El stress biológico debido a la electro-polución afecta profundamente a la fisiología y la comunicación intercelular.  Imaginad el caos resultante de una avería en los sistemas de comunicación en una ciudad.  En el cuerpo, la interrupción de los procesos habituales y la perturbación de la comunicación intercelular provocan un caos similar.  La función celular se deteriora y las membranas celulares se endurecen, volviéndose incapaces de absorber los nutrientes y de evacuar las toxinas.  La degradación de los procesos celulares entraña una verdadera alteración biológica de nuestro cuerpo.

Centenares de estudios han mostrado los efectos nefastos de las REM sobre el sistema inmunitario, la síntesis enzimática, el sistema nervioso, el aprendizaje, los cambios de humor y el comportamiento.  Todos los aspectos de la vida en los niveles moleculares, celulares bioquímicas y fisiológicos pueden sufrir con una exposición a las REM.

 

REM,   MELATONINA Y CÁNCER 

Las hormonas son  unas sustancias extremadamente potentes, teniendo en cuenta las minúsculas cantidades producidas por las glándulas endocrinas.  La mayor parte de entre ellas, los estrógenos, la progesterona, la testosterona, la insulina y la melatonina, son fabricadas por miles o por billones.  Las pequeñas fluctuaciones hormonales bastan para provocar grandes cambios fisiológicos.  Visto su papel preponderante en todos los procesos vitales, mantener el equilibrio hormonal es un imperativo para tener una salud óptima.  En caso de desequilibrio hormonal, la capacidad del cuerpo para regular los sistemas fundamentales se deteriora.

Nuestro estilo de vida moderno amenaza seriamente la función endocrina.  Stress, Tabaco, mala alimentación, falta de sueño y productos farmacéuticos…. Y otros tantos perturbadores endocrinos que amenazan este precario equilibrio.

No obstante, un género particular de perturbación endocrina esta siendo peligrosamente descuidado: La radiación electromagnética.  Una de las consecuencias mas graves de una exposición a las REM, es tal vez, su efecto sobre nuestro sistema hormonal. 

En el interior de nuestro cerebro se encuentra una glándula endocrina sensible a la luz, la glándula pineal (aproximadamente del tamaño de un guisante).  Desde siempre, la glándula pineal ha sido asociada al “tercer ojo”, místico que todo lo ve.  Antiguamente era considerado como inútil, aparece hoy como una de las glándulas más importantes del cuerpo, y particularmente la principal fuente de melatonina.  Descubierta hace cincuenta años, la melatonina es hoy reconocida como una hormona milagrosa, reguladora de numerosas funciones clave del crecimiento y de la salud de los humanos y protectora eficaz contra el cáncer.  La melatonina  se produce alrededor de noventa minutos después de dormir.  Los estudios muestran que las concentraciones de esta hormona en la sangre, bajan durante la jornada, aumentando al terminar el día, para llegar a su nivel máximo a mitad de la noche.  La glándula pineal responde a señales transmitidas por los nervios ópticos,  el hecho de bombardear de luz los ojos de una persona durante la noche puede inhibir el pico nocturno habitual de melatonina  disminuyendo la producción global durante la jornada.  Durante el sueño, la luz artificial tiene un efecto depresivo mucho más grande que la luz natural.

 

MELATONINA ANTICANCERÍGENA

Los investigadores están cada vez más sorprendidos por el número de procesos fisiológicos controlados o influenciados por la melatonina.  Además de regular los ritmos carenciales que gobiernan nuestro ciclo de vigilia/sueño, es uno de los mejores destructores de radicales libres,  asegurando así la síntesis del ADN, y la división celular.  No solamente la melatonina inhibe la liberación de andrógenos, sino que además impide también desarrollo del cáncer de mama.

La otra propiedad anti cancerígena de la melatonina reside en su capacidad de aumentar la cito-toxicidad de los linfocitos asesinos del sistema inmunitario.  Es incluso capaz de reforzar el sistema inmunitario y contrarrestar la inmune-depresión  producida por el stress.  En ese campo, actúa contra otros factores de división celular como: La hormona Prolactina  conocida bajo el nombre de “factor de crecimiento epidérmico”

La melatonina multiplica por cien las propiedades anti-tumorales de la vitamina D y estimula su facultad de paralizar el crecimiento de los tumores.  Por otra parte, actúa como un inhibidor de la enzima Aromatasa, lo que la convierte en un potente protector de los canceres dependientes de los andrógenos. 

Huelga decir que es vital el asegurar una producción regular y suficiente de melatonina habitualmente.  Por desgracia, dormir en una habitación en medio de nuestros aparatos favoritos (teléfono móvil, teléfono inalámbrico, reloj digital, lector de CD, aparato de radio, ordenador y televisión), puede seriamente inhibir nuestra producción nocturna de melatonina.  Puede ser que la disminución de la melatonina en el organismo sea el origen de los efectos nefastos de las REM sobre la salud

 

REM Y CANCER DE MAMA

En 2001, el Dr. Masami Ishido y sus colegas del Instituto Nacional Japonés de Estudios Medioambientales, han mostrado que las células mamarias cancerígenas tratadas con melatonina, reducen su crecimiento con respecto a las que expuestas a las REM con una determinada frecuencia.  Han constatado que los campos magnéticos perturban el sistema de señalización de las células (Su red de comunicación interna que determina la forma en la que ellas reaccionan en su entorno).  Hecho esto, el Dr. Ishido y sus colegas se han replanteado uno de los principios esenciales de la toxicología: Cuanto más débil sea la dosis, es mejor.  Los efectos de los REM observados a 12 miligauss (mG) eran casi los mismos que los observados en un campo cien veces superior a 1 gauss(G).  El Dr. Ishido ha constatado que cuanto más débil sea la dosis, más fuerte es el efecto.  Este mecanismo permite explicar el porqué una reducción de melatonina debida a los REM provoca determinados casos de cáncer, entre otros el cáncer de mama, el cáncer de próstata, el cáncer de colon, el melanoma, los tumores de ovarios maligno y la leucemia infantil.

Se sabe hoy en día que la supresión de la producción de melatonina sobreviene a unas frecuencias no muy superiores a las frecuencias normales de las habitaciones: 50 hertz (HZ) (por ejemplo en Francia) y 60 hertz (por ejemplo en Estados Unidos)

Si usted duerme próximo a una base de telefonía inalámbrica y/o a un reloj digital o si su instalación eléctrica es defectuosa, su exposición a REM, será suficiente para disminuir su producción nocturna de melatonina.  Teniendo en cuenta que esta hormona actúa como un potente anti cancerígeno

La relación entre el cáncer de mama y las REM no para de reforzarse.  La Dra. Patricia Coogan y sus colegas de la Boston University of Public Health, han constatado un incremento del riesgo de un 43% para las mujeres expuestas a campos magnéticos en su lugar de trabajo, tal como las que emanan de los grandes ordenadores.

De hecho, según este estudio, las mujeres con trabajos donde interviene la electricidad (electricistas, instaladores o reparadores de teléfonos o líneas, ingenieras eléctricas) corren mas riesgo de contraer cáncer de mama.  Esta incidencia creciente esta directamente asociada a la disminución de creación de melatonina por efecto de las REM.

Esta relación de causa-efecto no concierne solamente a las mujeres.  Cinco estudios coinciden que la exposición a niveles de REM elevados ha sido la causa de un aumento de casos de tumores de pecho masculino.  Varones que trabajan como montadores de líneas telefónicas y eléctricas, tanto en estaciones eléctricas como en los servicios públicos.  Los casos de cáncer de pecho están siendo seis veces más numerosos que entre la población masculina en general.

 

OTRAS PERTURBACIONES ENDOCRINAS CAUSADAS POR LAS REM

El Dr. Charles Graham, fisiólogo investigador, ha descubierto que los campos magnéticos tienen efectos sobre otros dos tipos de hormonas.  En  mujeres, sometidas a una exposición nocturna a tasas elevadas de REM en laboratorio, ha aumentado considerablemente las tasas de andrógenos,  factor de riesgo conocido como causante del cáncer de mama.  En hombres,  sometidos a la misma exposición, se ha reducido la tasa de testosterona,  caída hormonal asociada al cáncer de testículos y de próstata.

El Dr. Graham destaca que la amplitud constante de un campo tiene menos importancia que su intermitencia, o incluso que los saltos de potencia denominados “tránsitos eléctricos”.  Estos saltos pueden desarrollar una gran cantidad de energía en un lapso de tiempo muy corto.  Se producen cada vez que las luces u otros aparatos eléctricos se encienden, como los motores, o los compresores (tales como los frigoríficos, y los climatizadores) arrancan, o los variadores de intensidad funciones.  Las transmisiones son difíciles de evitar ya que pueden provenir de cualquier parte (de su propia casa, de los vecinos, o de las líneas eléctricas de la calle).  El Dr. Graham piensa también que los REM, responden mejor a la definición de perturbador endocrino, que otra clase de contaminantes del medio ambiente,  calificados de xeno-hormonas, ya que los campos magnéticos producen sus efectos actuando sobre las vías hormonales, y no como una hormona.

Millones de mujeres en el mundo se hacen prescribir Tamoxifen, el medicamento más popular para evitar una recaída del cáncer de mama.  Un estudio muy importe ha mostrado que el tamoxifen pierde su capacidad de inhibir la proliferación de células cancerígenas después de una exposición a los REM.  El nivel de REM productor de este efecto (12 mG o más),  es aquel que producen los aparatos cotidianos como el secador de pelo, los aspiradores, los abrelatas, los ordenadores, los hornos microondas, los flexos de oficina,  la batidora y los relojes eléctricos.  Aún más inquietantes son incluso otros estudios, en los que se afirma que si bien la melatonina contribuye a reducir la velocidad de desarrollo del cáncer de mama en cultivo experimental,  pierde su capacidad de inhibir el crecimiento de las células mamarias cancerígenas cuando se expone a un campo magnético de 12 Mg

Las mujeres tratadas con tamoxifen para un cáncer de mama son raramente, por no decir nunca, recomendadas a reducir su exposición a los REM, o a utilizar tecnologías adaptadas para protegerse de sus efectos.  Los neurotransmisores, categoría especial de las hormonas incluida la serotonina y la dopamina, juegan un papel importe en los cambios de humor.

Se sabe hoy en día que existe una forma específica y muy peligrosa de REM que afecta al funcionamiento del cerebro y del cuerpo: Las señales transmisoras de información emitidas por las antenas de telefonía móvil.  Conocidas bajo el nombre de “mezcla de campos cercanos” y que se emiten sobre un radio de 15 a 18  centímetros alrededor de la antena.

Las fluctuaciones de la tasa de serotonina está notablemente asociado a la depresión.  Unas tasas  reducidas de serotonina en el cerebro han sido, por ejemplo, asociadas a un aumento de casos de suicidio.  Un estudio simulado ha examinado las funciones cerebrales expuestas a campos magnéticos de 60 Hz., y los resultados revelan que las tasas de serotonina y de dopamina (esta última afecta a los procesos cerebrales que controlan el movimiento, la reacción emocional, la sensación de placer y de dolor) se ven considerablemente reducidas tras una exposición.  Solo la tasa de dopamina vuelve la normalidad varios meses después.

Estos estudios revelan a las REM, o ICRW, como una energía que representa una amenaza desconocida.  Para protegerse, la membrana celular, se cierra instantáneamente.  Esto significa que los nutrientes no pueden ya penetrar más dentro de la célula y que las toxinas y desechos no pueden salir de la misma.  Esto significa también que la comunicación intercelular vital se rompe

Según el Dr. Becker: “Parece existir dos tipo de depresión clínica: Una debida a simples factores psicosociales y la otra debida a un factor externo influyente sobre la producción de sustancias químicas psicoactivas de la glándula pineal.  La relación entre la glándula pineal y los campos magnéticos ya ha sido demostrada.  Sería correcto incluir la evaluación del efecto de los campos electromagnéticos anormales en la búsqueda del factor responsable”.  Otros investigadores son de la misma opinión.

 

HORMONAS DEL STRESS Y REM

Una exposición a tasas elevadas de REM aumenta también la tasa de adrenalina, la hormona de la fuga o de la lucha, principal hormona causante de stress, liberada por las glándulas suprarrenales.  Blake Levitt, autor de Electrical Fields, explica: “Un stress crónico prolongado afecta a todo el sistema anatómico, incluido el sistema reproductor.  Un stress subliminal, puede afectar a la fertilidad y aumentar la tensión arterial,  lo que puede provocar cardiopatías, accidentes vasculares cerebrales e inmunodeficiencia…. de lo cual, unas breves exposiciones a REM, como la utilización de un teléfono inalámbrico varias veces a lo largo de la jornada, serían suficientes para provocar picos de adrenalina”.

La otra hormona afectada a largo plazo por el stress es el cortisol.  Igualmente producido por las glándulas suprarrenales, el cortisol juega un papel muy importante en el metabolismo de la glucosa, en la regulación de la tensión arterial, en la liberación de insulina, en los procesos inflamatorios, en el equilibrio hormonal y el funcionamiento del sistema inmunitario.  La tasa de cortisol, influye también en la energía corporal y en la memoria.  Una exposición continuada a las REM,  provocan un aumento la tasa de cortisol sérico,  aumentando con ello también el riesgo de padecer stress.

 

TELÉFONOS PORTÁTILES Y RADIACIONES PRÓXIMAS

Sabemos hoy en DIA que existe una forma específica y muy peligrosa de REM, que afecta al funcionamiento del cerebro  y el cuerpo: Las señales transmisoras de información emitidas por las antenas de los teléfonos móviles, conocidos bajo el nombre de “mezcla de campos cercanos” (fíjense que las antenas de los nuevos teléfonos móviles es invisible;  eso no significa que la radiación cercana sea menos perjudicial para la salud).  La radicación cercana se emite sobre un radio de 15 a 18 centímetros alrededor de la antena,  aunque sea invisible.

Es el resultado del salto de potencia necesario para transmitir una señal de radio a una base situada a varios kilómetros.  Cada vez que activamos el teléfono para enviar o recibir (tanto si lo tenemos pegado a la oreja, como si lo llevamos en el cinturón o guardado en el bolsillo), estamos expuestos a las peligrosas ondas portadoras de informaciones en el  “conjunto de campos cercanos”.

Los últimos estudios muestran que la radiación de fondo de numerosos aparatos eléctricos equivale a un REM, mientras que los recientes terminales Wifi, equivalen en densidad a las ondas portadoras de informaciones que emanan del “campo cercano

Esto significa que el peligro se encuentra no solamente en las proximidades de la antena del teléfono portátil, sino también en el entorno general en el que estamos expuestos todos los días. (36)

Aunque la industria de la tecnología inalámbrica y algunos organismos gubernamentales continúan afirmando la inocuidad de los teléfonos móviles (No sin recordarnos esto a la industria del tabaco), recientes pruebas científicas han revelado un esquema emergente de graves problemas de salud debidas a una exposición a la radiación de campos cercanos.

Entre otros de los problemas biológicos inventariados, citamos una degradación de la barrera hemato-encefálica, con daños genéticos, una ruptura de la comunicación intercelular y un riesgo creciente de cáncer. (37).  La barrera hemato-encefálica es un filtro situado en los vasos sanguíneos del cerebro que impide a las sustancias químicas peligrosas alcanzar el tejido cerebral sensible y destruir el ADN.  La radiación de “campo cercano” es capaz de abrir la barrera hemato-encefálica, permitiendo así a las sustancias tóxicas penetrar libremente en el tejido cerebral.

 

ANOMALÍAS EN EL ADN

La radiación de campo cercano daña también el ADN.

Un buen número de estudios han descubierto los llamados micro-núcleos (fragmentos de ADN rodeados de una membrana sin función fisiológica) en la sangre de los usuarios continuados de teléfonos móviles.  Los micro-núcleos son el resultado de una degradación de la facultad de auto reparación de la célula y son un claro signo de daños genéticos.  Si las células cerebrales ya no son capaces de auto repararse, los tumores tienen el campo libre.  Otro hecho, más turbador, es que la presencia de micro-núcleos puede también revelar otros problemas de salud (inmunodeficiencia, trastornos del sueño, trastornos deficitarios de la atención, autismo y enfermedad de Alzheimer).  Las principales glándulas del cuerpo (hipófisis, hipotálamo y glándula pineal) están situadas en el cerebro.  Un uso continuado del teléfono móvil puede considerablemente perturbar el funcionamiento de las mismas y la facultad de señalización de las hormonas. 

No olvidemos que el circuito eléctrico de los teléfonos móviles, genera una energía competidora que hace interferencias con el campo biológico de la persona o su campo de energía.

Este tipo de REM omnipresente, o ambiental, afecta a numerosos procesos fisiológicos.  Cuando colocamos el teléfono móvil en la cintura, o lo guardamos en el bolsillo del pantalón,  el tejido y los órganos más próximos se ven afectados por campo ambiental.  Especialmente los de la región pélvica.  Hay dos estudios que han dejado claro una reducción del 30 % de la cantidad de espermatozoides en los utilizadores habituales de teléfonos móviles.  Al igual que, como cada vez más mujeres fijan su teléfono móvil a la cintura, los órganos reproductores femeninos están sufriendo las consecuencias.

Es necesario también dar la voz de alarma sobre los peligros de las radiaciones ambientales de los auriculares telefónicos inalámbricos.  Se sabe hoy en día que dichos auriculares, lejos de tener un efecto de protección, pueden en realidad, aumentar las emisiones de las radiaciones en el cerebro hasta un 300 %.  La tecnología Bluetooth es especialmente peligrosa.  La única solución consiste en utilizar un auricular tradicional.

Independientemente de que tenga usted o no un teléfono móvil, la proliferación de la tecnología inalámbrica expone a todos a una radiación peligrosa que daña continuamente a las células y altera todos los procesos fisiológicos.  No hay forma de escapar

 

TELÉFONOS MÓVILES, MEMBRANAS CELULARES Y ONDAS PORTADORAS

Estos últimos años, la exposición a las radiofrecuencias emitidas por los teléfonos móviles y por los aparatos de comunicación inalámbrica causante de provocar graves daños fisiológicos en las células, ha pasado a ocupar el centro de las preocupaciones.

En un principio la industria de la tecnología inalámbrica y el gobierno americano no consideran a las radiofrecuencias de los teléfonos móviles como peligrosas para la salud.  A pesar de las numerosas pruebas que demuestran lo contrario, la industria mantiene su posición.  En los comienzos de esta tecnología, se admitía un solo efecto térmico (un recalentamiento, como en un horno micro-ondas) que podía dañar los tejidos.  Los teléfonos móviles no eran lo suficientemente potentes como para recalentar tejidos, y el gobierno americano ya no ha solicitado más estudios que apunten a examinar los problemas potenciales para la salud.

Sin embargo, la ciencia emergente ha descubierto que el problema de los teléfonos móviles no viene causado por su potencia de salida (efecto térmico), sino por la transferencia de informaciones sobre la “onda portadora”  emitida y recibida por la antena del teléfono.  Se conoce con el nombre de “onda radioeléctrica portadora de informaciones” (ICRW), y se trata de una frecuencia que transporta unos paquetes específicos de información permitiendo la transmisión de diversos elementos a la vez (voz, texto, imágenes, etc.) (41).  Es aquí donde reside el problema: Esta onda tiene una frecuencia inédita.  Nuestras células no están en absoluto habituadas y la perciben como un peligroso invasor extranjero.

Los últimos estudios han identificado claramente los mecanismos biológicos de los efectos nefastos de las ICRW.  Nuestras membranas celulares estas dotadas de receptores especiales llamados “microtúbulos”, capaces de detectar las frecuencias.  Estos receptores interpretan las ICRW, como una energía amenazante y desconocida.  Para protegerse, la membrana celular se encierra instantáneamente.  Esto significa que los nutrientes, no pueden ya penetrar en la célula y que las toxinas no pueden salir de ella.  Esto significa también que la comunicación intercelular vital se rompe (42).  Este efecto es inmediato y dura tanto tiempo como la persona está expuesta a los ICRW.  Cuanto mayor es la duración de los lapsos de tiempo de exposición, mayores y más importantes son los daños biológicos (daños en los radicales libres, mutación genética, perdida de energía celular, envejecimiento prematuro y a la larga, enfermedades degenerativas).

 

EL DR. CARLO,  LA REFERENCIA

Si hay alguien que conoce bien los efectos nefastos de los teléfonos móviles y de la tecnología inalámbrica, es GEORGE CARLO,  Doctor en Medicina, titular de un doctorado y autor de Cell Phones: Invisible Hazards in the Wíreles Age.   Eminente profesor de epidemiología, el Dr. Carlo fue requerido por la Cellular Telecommunications Industry Association  (CTIA), como jefe de la investigación de un programa de búsqueda, que durante cinco años y con un presupuesto de 28 millones de dólares, se llevo a cabo para estudiar sobre los efectos potencialmente nefastos de los teléfonos móviles.

La CTIA estaba segura de que no iban a descubrir ningún efecto nefasto.  Ahora bien, el Dr. Carlo y su equipo de doscientos investigadores, de hecho, los encontraron.  El Dr. Carlo fue entonces despedido sin miramientos y los resultados de su investigación fueron enterrados.  Desde entonces se convirtió en uno de los detractores mas celebres y más virulento de la industria de tecnología inalámbrica, y en uno de más grandes especialistas mundiales en electro-polución.  Según el Dr. Carlo: “Estas ondas radioeléctricas portadoras de información desencadenan reacciones en las membranas proteínicas que protegen las células, provocando una perturbación en la comunicación intercelular y en la acumulación de radicales libres en el interior de la célula.  Es de suma importancia comprender este mecanismo, ya que explica la gran diversidad de los síntomas observados en los pacientes que padecen una electro hipersensibilidad, y otros trastornos como dolores de cabeza y una ansiedad inexplicable que ya sabemos, a partir de ahora, que son debidas a esas ondas radioeléctricas portadoras de información”

Imaginen que pasa si una célula no puede recibir sus nutrientes vitales, ni eliminar sus desechos, ni comunicarse correctamente con las otras células: ¡Es el caos más completo a nivel celular!

Como estamos rodeados de torres de antenas de telefonía y de usuarios de teléfonos móviles, es prácticamente imposible no estar continuamente expuestos a los ICRW, y a los perjuicios constantes de nuestros procesos fisiológicos.

 

LA TECNOLOGIA INALÁMBRICA: UN RIESGO CRECIENTE

La Mobile Telephone Health Concerns Registry es una organización sin ánimo de lucro creada para reunir información sobre los efectos de los teléfonos móviles en la salud.  Antes las denuncias concernientes a los problemas de salud eran principalmente debidas a los teléfonos móviles.  En los dos últimos años, sin embargo, la mayor parte conciernen a las ondas radioeléctricas ambientales (de fondo) que emanan de las múltiples fuentes inalámbricas.  La potencias de estas ICRW ambientales tienen parecida intensidad que las radiofrecuencias emitidas por los teléfonos móviles.

¿Qué significa esto?  Que tenga usted, o no, un teléfono móvil, está igualmente expuesto, dada la proliferación de la tecnología inalámbrica.  Estamos expuestos a una radiación peligrosa que daña instantáneamente nuestras células y altera nuestros procesos fisiológicos.  No hay forma de escapar.

El Dr. Carlo es consciente de la crisis de salud pública sin precedentes que se prepara en el mundo inalámbrico.  “Los estudios científicos continúan mostrando que las onda radioeléctricas de los teléfonos móviles y de otros aparatos inalámbricos, hoy utilizados por  millones de personas en el mundo, son peligrosos.  La industria de los teléfonos móviles elude el problema: Los gobiernos del mundo entero tienen vínculos tan intrincados con estas industrias que son incapaces de proteger a los consumidores.  La ciencia emergente muestra que entrañan problemas que van desde trastornos de aprendizaje y del espectro autista hasta el cáncer.  Si no lo tratamos, serán nuestros hijos y los niños en general quienes soportarán más aún es peso de la enfermedad.

La mala noticia es que estamos ante una crisis de la salud pública sin precedentes.  La buena noticia es que existen medidas preventivas eficaces y científicamente validas.

 

TRES MEDIDAS DE PROTECCIÓN

Resolver el problema de la electro-polución exige actuar en tres niveles distintos.  El Dr. Carlo afirma que es necesario actuar en estos tres niveles a la vez para protegerse suficientemente contra la electro-polución.  El Dr. Carlo lo denomina “el paradigma de la salud pública”

-          Ante todo, es necesario impedir el desencadenamiento inapropiado de la reacción de protección de la membrana celular.  Existen dos tecnologías que actúan sobre la causa de los problemas.  Son, por un lado los cascos adaptados, y por otro las tecnologías de campo sonoro activas (puestas a prueba por la armada americana) y pasivas.

-          A continuación, es muy importante exponerse lo menos posible y  protegerse al máximo de todas las fuentes de emisión de campos electromagnéticos (CEM), de radiofrecuencias (RF), con el fin de atenuar los efectos deterioradores de una exposición a los REM en las comunicaciones intercelulares.

-          Finalmente, es necesario reparar y corregir los daños celulares.  Es aquí donde intervienen los alimentos, los antioxidantes y los complementos favorecedores de la reparación.

Para una máxima protección, hay que actuar en los tres niveles simultáneamente: Proteger a las células de daños directos, restablecer la comunicación intercelular, y alimentar al cuerpo con los nutrientes esenciales para auto repararse y permanecer sano.

El Dr. Carlo explica: “El efecto combinado de la electro-polución a estos tres niveles es un riesgo sanitario cada vez más grave, ya que se manifiesta insidiosamente en nuestras vidas.  La exposición a las radiaciones afecta dañinamente a los procesos biológicos fundamentales, principalmente a la defensa inmunitaria y a otros mecanismos de compensación fisiológica.   Así, la electro-polución debilita a la población de cara a agresiones medioambientales, como la contaminación del aire y del agua, la malnutrición, la exposición a los virus y bacterias,  así como incrementa los factores de stress físicos, tales como el calor o frío extremos, y otros factores estresantes de la vida.

Mientras que bajemos la cabeza ante el mundo de la Alta Tecnología, que nos fascina, estaremos admitiendo que estamos participando en un  proceso de experimentación a gran escala.  La electro-polución constituye una autentica amenaza para la actuales y futuras generaciones.  Tomar las medidas eficaces no es un lujo, es una necesidad.  Nos guste o no el mundo electromagnético no va a desaparecer de nuestro entorno.  Es por ello que cada uno de nosotros debemos tomar nuestras propias medidas para protegernos todo lo posible, así como a nuestra familia, y a las generaciones futuras.

 

NOTA DEL EDITOR

En lo concerniente a la lucha contra la electro-polución, recomendamos visitar la página de Next-Up Organisation, una verdadera mina de información sobre el tema.

 

NOTA DEL AUTOR

Hasta ahora, nos hemos negado siempre a aconsejar tal o cual producto, pero ahora el problema de electro-polución es tan grave, que me siento obligado a recomendar una tecnología que ha sido probada.  BIOPRO Technology ha demostrado la eficacia y ha concedido la licencia de explotación de dos tecnologías combinadas en sus chips de teléfonos y en los chips  “universales”, para ordenador, router inalámbrico, etc.  La primera, llamada tecnología de efecto de resonancia molecular, es una tecnología pasiva de campo sonoro abreviado que permite detener en el primer nivel los daños causados en las membranas celulares.  La segunda es una tecnología de energía sutil, la tecnología de resonancia energética, que actúa en el segundo nivel, mejorando la comunicación intercelular.  Visitad la página de Internet bioenergeticsinstitute.com para consultar sus estudios. 

 

A PROPÓSITO DEL AUTOR

Sherrill Sellman es naturopata diplomada, psicoterapeuta, conferenciante internacional,  presentadora de radio, escritora y consejera galardonada por sus consejos de seguridad relativos a las radiaciones electromagnéticas.  Es autora de varios best-sellers, y escritora de numerosos artículos.

Se puede contactar con Sherrill Sellman por teléfono (918) 437 1058, por e-mail en golight@earthlink.net, sitio en internet o por correo en: PO Box 690416, Tulsa, OK 74169-0416, Estados-Unidos. 

REFERENCIAS

1) Dibirdik I, Krustupaitis D, Kurosaki T, Tuel-Ahlgren L, Chu A, Pond D, Tuong D, Luben R, Uckun FM, «Stimulation of Src Family Protein-tyrosine Kinases as a Proximal and Mandatory Step for SYK Kinasedependent Phospholipase Cy2 Activation in Lymphoma B Cells Exposed to Low Energy Electromagnetic Fields», J Biol Chem 13 fév 1998; 273(7):4035-39.
2) Kristupaitis D, Dibirdik I, Vassilev A, Mahajan S, Kurosaki T, Chu A, Tuel-Ahlgren L, Tuong D, Pond D, Lube R, Uckun FM, «Electromagnetic Field-induced Stimulation of Bruton's Tyrosine Kinase», J Biol Chem 15 mai 1998; 273(20):12397-401.
3) Shaw GM, Croen LA, «Human adverse reproductive outcomes and electromagnetic field exposures: review of epidemiologic studies», Environmental Health Perspectives déc 1993; 101 (suppl 4):107-19.
4) Blaasaas KG, Tynes T, Lie RT, «Residence near power lines and risk of birth defects», Epidemiology 2003; 14:95-98.
5) Ahlbom A, Cardis E, Green A, Linet M, Savitz D, Swerdlow A (ICNIRP [International Commission for Non-lonizing Radiation Protection] Standing Committee on Epidemiology, «Review of the Epidemiologic Literature on EMR and Health», Environ Health Perspectives déc 2001; 10 9(Suppl 6): 911-933.
6) Lyskov E, Juutilainen J, Jousmäki V, Hänninen O, Medvedev S, Partanen J, «Influence of short-term exposure of magnetic field on the bioelectrical processes of the brain and performance», Int J Psychophysiol 1993; 14:227-231.
7) Kavet R, «Contact current hypothesis: Summary of results to date», Bioelectromagnetics 2005; 26(Suppl 7): S75-85.
8) Graham C, Cook MR, Gerkovich MM, Sastre A, «Examination of the melatonin hypothesis in women exposed at night to EMR or bright light», Environ Health Perspect mai 2001; 109(5):501-507.
9) Havaas M, Stetzer D, «Electromagnetic hypersensitivity: biological effects of dirty electricity with emphasis on diabetes and multiple sclerosis», Electromag Biol Med 2006; 25(4):259-68.
10) Salford LG, Brun AE, Eberhardt JL, Malmgren L et Persson BRR, «Nerve cell damage in mammalian brain after exposure to microwaves from GSM mobile phones», Environ Health Perspect juin 2003; 111(7):881-883
11) Savitz DA, Checkoway H, Loomis DP, «Magnetic field exposure and neurodegenerative diseuse mortality among electric utility workers», Epidemiology 1998;9:398-404.
12) Becker, Robert 0, MD, Cross Currents:The Promise of Electromedicine, the Perils of Electropollution, Jeremy R Torcher, New York, décembre 1989, 1ère éd.
13) Interview du Dr. Robert O. Becker par Linda Moulton Howe, Londres, 14 mai 2000, à http://www.energyfields.org/science/becker.html.
14) Sienkiewicz ZJ, Saunders RD, Kowalczuk Cl (1991), «Biological Effects of Exposure to Non-ionizing Electromagnetic Fields and Radiation. Il. Extremely low Frequency Electrical and Magnetic Fields», NRPB Report R239, National Radiological Protection Board, Chilton, Royaume-Uni.
15) Saunders RD, Kowalczuk Cl, Sienkiewicz ZJ (1991), «Biological Effects of Exposure to Non-ionizing Electromagnetic Fields and Radiation. III. Radiofrequency and Microwave Radiation», NRPB Report R240, National Radiological Protection Board, Chilton, Royaume-Uni.
16) Becker RO, Marino AA, «Effects of Electromagnetic Energy on the Nervous System», résumé du Chapitre 5 dans Electromognetism & Life, State University of New York Press, Albanie, 1982, à http://www.ortho.lsuhsc.edu/Faculty/Marino/EL/EL5/Summary5.html.
17) Paneth N, «Neurobehavioral effects of power-frequency electromagnetic fields», Environ Health Perspectives déc 1993; 101(S4):101-106.
18) Srinivasan V, Spence DW et al., «Melatonin, environmental light, and breast cancer», Breast Cancer Res Treat 31 mai 2007; PMID: 17541739.
19) Robien K, Cutler G, Lazovich D, «Vitamin D intake and breast cancer risk in postmenopausal women: the Iowa Women's Health Study», Cancer Causes Control 2007 Sep; 18(7):775-82, e-pub 5 juin 2007, PMID: 17549593.
20) Masami I, Nitta H, Kabuto M, «Magnetic fields (MF) of 50 Hz at 1.2 pT as well as 100 pT cause uncoupling of inhibitory pathways of adenylyl cyclase mediated by melatonin 1 a receptor in MF-sensitive MCF-7 cells», Carcinogenesis juil 2001; 22(7):1043-48.
21) «When Enough is Never Enough: A Reproducible EMF Effect at 12 mG», Microwave News, 23 novembre 2005, http://www.microwavenews.com/nc_nov2005.html.
22) Coogan PF, Clapp, RW, Newcomb PA, Wenzl TB, Greg Bogdan G, Mittendorf R, Baron JA, Longnecker MP, «Occupational Exposure to 60-Hertz Magnetic Fields and Risk of Breast Cancer in Women», Epidemiology sept 1996; 7(5):459-64.
23) Demers PA, Thomas DB, Rosenblatt KA et al., «Occupational Exposure to Electromagnetic Fields and Breast Cancer in Men», Am J Epidemiology 1991; 134(4):340-47
24) Graham C, op. cit.
25) Charles LE, Loomis D et al., «Electromagnetic fields, polychlorinated biphenyls, and prostate cancer mortality inelectric utility workers», Am J Epidemiol 15 avr 2003; 157(8):683-91.
26) Harland JD, Lee MY, Levine GA, Liburdy RP, «Differential Inhibition of Tamoxifen's Oncostatic Functions in a Breast Cancer Cell Line by 12 mG Magnetic Field», dans Electricity and Magnetism in Biology and Medicine, Bersani F (ed.), Plenum Press, Bologne, Italie, 1998.
27) Girgert R, Schimming H, Körner W, Gründker C, Hanf V, «Induction of tamoxifen resistance in breast cancer cells by ELF electromagnetic fields», Biochemical and Biophysical Research Communication 4 nov 2005; 336(4):1144-49.
28) Becker, Robert O, MD, Cross Currents: The Promise of Electromedicine, the Perils of Electropollution, op. cit., p. 208.
29) «Serotonin, Suicidal Behaviour and Impulsivity», The Lancet, 24 Oct 1987, p. 949-50.
30) Becker, op. cit.
31) Perry FS et al., «Environmental Power Frequency Magnetic Fields and Suicide», Health Physics 1981; 41:267-277; Perry FS, Pearl L, «Health effects of ELF fields and illness in multi-storey blocks°, Public Health jan 1988; 102(1):11-18.
32) «Serotonin...», The Lancet, op. cit.
33) Blake Levitt B, Electromagnetic Fields: A Consumer's Guide to the Issues and How to Protect Ourselves, Harcourt Brace & Company, Orlando, Florida, 1995, p. 133
34) Becker, op. cit.
35) Hillman D, «Exposure to Electric and Magnetic Fields (EMR) Linked to Neuro-Endocrine Stress Syndrome: Increased Cardiovascular Disease, Diabetes, & Cancer», Shocking News, n°8, novembre 2005.
36) Carlo, George, Dr and Schram, Martin, Cell Phones: Invisible Hazards in the Wireless Age - An Insider's Alarming Discoveries About Cancer and Genetic Damage, Carroll & Graf, 2001, réédition 9 février 2002, p. 217.
37) Transcription de la rencontre du Dr. George Carlo avec le comité d'enquête sur les mâts téléphoniques, États de Jersey, Royaume-Uni, 26 février 2007, http://www.jerseymastconcern.co.uk/drcarlotranscript.html.
38) Lai H, Singh NP, «Magnetic-Field-Induced DNA Strand Breaks in Brain Cells of the Rat», Environ Health Perspectives mai 2004; 112(6):687-94
39) Agarwal A, Titulaire d'un doctorat (Directeur, Clinicat Andrology Laboratory and Reproductive Tissue Bank; Directeur de recherche, Reproductive Research Center, The Cleveland Clinic), «Relationship between Cell Phone Use and Human Fertility: An Observational Study», présentation P-398, 23 octobre 2006, 62ème congrès annuel de l'American Society for Reproductive Medicine (ASRM), Nouvelle-Orléans, 21-25 octobre 2006
40) Henderson M, «Mobiles may decrease men's fertility», 23 octobre 2006, http://www.timesonline.co.uk/tol/news/world/article610494.ece.
41) Carlo and Schram, op. cit., p. 246.
42) Ungar J, McGregor S, Rahman M, Taylor D, Torres N, Hanser A, «Energy Resonance Technology (ERT): A Targeted Intervention For Electro-Magnetic Radiation (EMR) Induced Biological Effects», International Journal of Clinical Bioenergetics 2007, Bioenergetics Institute, http://www.bioenergeticsinstitute.com/Portals/0/Documents/Ungar2006ERTintervEMRbioeffectupdateCorrected.pdf.
43) Interview télévisée du Dr. George Carlo à Londres, RTE News, Dublin, Irlande, 22 février 2007, http://www.rte.ie/news/2007/0222/primetime_av.html retransmise dans Omega-News, 2 février 2007, http://omega.twoday.net/20070223.
44) http://www.health-concerns.org.
45) http://www.safewireless.org.
46) Entretien téléphonique avec le Dr George Carlo, 5 juin 2007.


NEXUS N° 53
Novembre – Décembre 2007

 

 

 

 

 

Día de la contaminación electro magnética

ECOLOGISTAS DENUNCIAN  EL AUMENTO IMPARABLE DE LA ELECTROPOLUCIÓN EN EL  DIA CONTRA DE LA CONTAMINACIÓN ELECTROMAGNÉTICA

 PROPONEN  UN CAMBIO DE LA LEGISLACION Y LA REBAJA DRÁSTICA DE LOS NIVELES DE EXPOSICIÓN CIUDADANA

Ecologistas en Acción junto con organizaciones vecinales, sociales de Europa conmemoran este 24 junio como Día contra  la Contaminación Electromagnética.  En el estado español es una fecha motivo de reflexión sobre el alarmante aumento de la contaminación electromagnética en nuestro país, causada  por dos agentes principales por un lado, los campos electromagnéticos de baja frecuencia de las líneas eléctricas  y subestaciones y transformadores y, por otro lado, los campos electromagnéticos producidos por las antenas estaciones base de telefonía móvil y otras  infraestructuras como los sistemas Wifi y WiMAX 

Esta organización ecologista quiere denunciar, el crecimiento insostenible y a la proliferación caótica de estaciones base de telefonía móvil y otras infraestructuras de telecomunicaciones que han supuesto la instalación descontrolada de estas redes radioeléctricas, un aumento significativo de la contaminación electromagnética y el crecimiento de la percepción social del riesgo asociado a estas infraestructuras.

La legislación estatal que funciona hasta ahora, obedece a  los intereses de las empresas eléctricas y las grandes operadoras de la telefonía móvil y  no ha  resuelto el problema; lo ha agravado con el aumento de la contaminación electromagnética en nuestros entornos urbanos. La movilización social, vecinal, y ecologista ha  hecho que algunos municipios del estado establezcan  o se planteen normativas más preventivas y niveles de exposición al público más restrictivos 

Países de nuestro entorno han establecido normativas y legislaciones mucho más restrictivas que las  viejas recomendaciones de la UE para los niveles de emisión  por criterios de prevención para la salud pública: Italia, Suiza, Luxemburgo, Bélgica (región de Bruselas), Austria (land de Salzburgo), Rusia, etc

Muchas conferencias internacionales de investigadores  independientes alertan sobre los posibles efectos y riegos en la salud pública (Declaraciones de Viena 1998, Salzburgo 2000, Roccaraso 2000, Alcalá de Henares 2002, Catania 2002, Friburgo 2002, Benevento 2006, Venecia 2007, etc.). El  informe Bioinitiative 2007  redactado por 14 científicos y  expertos en salud pública para documentar las evidencias científicas de los campos electromagnéticos sobre la salud; señalan que los límites públicos existentes de  seguridad son inadecuados tanto para los campos electromagnéticos de baja frecuencia  como los  de radiofrecuencias y microondas.  Ecologistas en Acción considera necesario y urgente inversiones públicas en la investigaciones sobre campos electromagnéticos y salud.

Ecologistas en Acción  propone como alternativa una reforma y transformación de la Ley General de Telecomunicaciones y la normativa sobre control del espacio radioeléctrico así como de la Ley de Sector Eléctrico y los Reglamentos de líneas de alta tensión y subestaciones eléctricas. La aplicación del Principio de Precaución y principio ALARA/ALATA (la mínima emisión técnicamente posible),distancias de seguridad a zonas residenciales y el control restrictivo del despliegue de estas infraestructuras deben ser los criterios básicos a la hora de autorizar la ubicación de este tipo de infraestructuras eléctricas y de telecomunicaciones.

 

 

 

 

Desmontar las antenas de telefonía móvil más polémicas costaría un millón de euros

RUBÉN ASENSIO. 15.11.2007

  • De las 260 antenas que hay en Zaragoza, 60 están cerca de colegios o centros sanitarios.

  • Por ahora, el Ayuntamiento de Zaragoza sólo ha retirado una.

En torno a 60 de las 260 antenas de telefonía móvil que hay en Zaragoza están situadas en zonas polémicas, a menos de 100 metros (el mínimo que marca la ley) de colegios, centros de salud o residencias de ancianos. Retirarlas de forma directa le costaría al Ayuntamiento de Zaragoza en torno a un millón de euros, a unos 20.000 euros por antena (que luego reclamaría a las operadoras).

Los responsables de la Asociación en Defensa de la Salud Pública (Asides) denuncian que estas estructuras son ilegales y reclaman al Consistorio que las retire de forma inmediata «por las consecuencias nocivas que tienen para la salud», explican.

El Ayuntamiento de Zaragoza se comprometió a desmontar las antenas que no tuvieran licencia o incumplieran la ley. Sin embargo, por ahora sólo han retirado una (en García Condoy, por iniciativa de la pasada concejalía de Urbanismo de CHA), cuyo desmontaje costó casi 22.000 euros.

Según estas cifras, retirar las 60 antenas cercanas a colegios y centros sanitarios costaría en torno a un millón de euros, que tendría que adelantar el Ayuntamiento y después podría reclamar a los propietarios a través de la vía administrativa.

«Llevamos años reclamando al Ayuntamiento que quite estas antenas, que están cerca de niños y ancianos e incumplen la ley», explica Eduardo Izquierdo, de Asides.

Lo primero, demostrar que es ilegal

El proceso para retirar una antena de telefonía móvil es largo y costoso. En primer lugar hay que demostrar que es ilegal. Después, el Ayuntamiento remite un requerimiento al operador para que la retire. El propietario puede entonces alegar. Al final, el Consistorio toma la decisión de desarmar la estructura de forma subsidiaria y luego reclama los gastos a la operadora.

Problemas de salud: Los vecinos que viven cerca de antenas de telefonía móvil aseguran que sufren cefaleas, picores e incluso tumores. Sin embargo, aún no hay confirmación científica de que las emisiones de las antenas sean nocivas para la salud.

Falta de cobertura: Las operadoras explican que retirar más antenas conllevaría limitar y reducir la cobertura de los móviles en la capital aragonesa.

 

 

 

 

 

Manuel Portolés

 
 

Coinciden estos días varias circunstancias para escribir sobre las radiaciones electromagnéticas (incluida telefonía móvil) y sus consecuencias para la salud, en especial de niños y adolescentes.
Una de estas ocurrencias es la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana que sobre los efectos nocivos de las antenas de telefonía móvil dice: «?la cercanía a las antenas de telefonía móvil no generan para los seres humanos, al día de hoy ´(mayo 2008)´ y con los conocimientos técnicos actuales, un riesgo acreditado». Y añade: «En punidad, ningún comité científico ha podido demostrar mínimamente que las antenas de telefonía móvil sean contraproducentes o causen efectos para la salud, por tanto, se debería de dejar a las empresas de telecomunicaciones que las instalasen donde tuviesen por conveniente con sólo respetar monumentos históricos o ciertos conceptos estéticos?». Sin embargo, ante tal despropósito, como veremos, la Sala se declara «dispuesta a revisar su postura conforme avancen los estudios científicos...».
Otra de las circunstancias coincidentes en este tema es la resolución del Consejo de Ministro de final de mayo, donde el Gobierno aprueba el nuevo reglamento del dominio público radioeléctrico, con el objeto de «fomentar la competencia, la innovación y la aparición de nuevos servicios», dada la importancia estratégica creciente del sector. Pero se olvidan de mencionar la protección de la salud de sus ciudadanos, ni siquiera en Ministerio de Sanidad, con las competencias de investigación mermadas, al trasladarse al Ministerio de Ciencia, su organismos científico de excelencia, el Instituto de Salud Carlos III, se acuerdan de tratar de vez en cuando este tema.
Una «onda» genotoxicidad
Existe abundante literatura científica sobre las consecuencias para la salud de vivir alrededor de una instalación de telefonía móvil (véase en estas mismas páginas «La onda herziana, un experimento global», 22 de marzo 2007). A modo de muestra, les recuerdo los estudios de Eger y Wolf que coinciden, ya en 2004, en establecer un aumento del cáncer (4 veces más) en radios de 300 metros alrededor de estaciones base de telefonía móvil, o el estudio financiado por la Unión Europea (proyecto Reflex 2005) que demuestró, en más de diez laboratorios diferentes, que la radiación electromagnética de la telefonía móvil es capaz de romper el ADN, nuestra información genética; tras estos resultados la financiación (3 millones de euros) fue suspendida. Incluso, la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) incluye a los campos electromagnéticos de baja frecuencia (más pequeña que las microondas de la telefonía móvil) como posible cancerígeno (categoría 2B); aunque para muchos investigadores, según los últimos datos, debería de estar en la categoría 1.
En la actualidad existen cientos de trabajos científicos que demuestran la interacción, nada positiva, de la radiación electromagnética con la salud. Solo en genotoxicidad (alteraciones del ADN celular) se han publicado un centenar de trabajos, y curiosamente el 60 % encuentran efectos perniciosos; el 26 % de los trabajos positivos con el genoma estaban financiados por el sector de las telecomunicaciones, mientras que éstos mismos organismos financiaban el 83 % de los trabajos negativos, sin daño en ADN. Es más, desde 1990, una de las revistas del sector, Radiation Research, solo ha publicado uno de estos trabajos genotóxicos positivos frente a los 21 negativos que vieron la luz en sus páginas. Parece que algo huele a podrido en la ciencia electromagnética (véase en estas mismas páginas «Mentiras, estadísticas y telecomunicaciones», 17 de mayo 2007).
Además de los trabajos científicos que demuestran la interacción de este tipo de tecnología con la salud de los humanos, comienza a crecer la literatura sobre los perjuicios para la fauna urbana (aves especialmente y animales domésticos), y también para los árboles e insectos. De todas formas, si la industria del sector, alineada con la política sanitaria y medioambiental, está tan segura de que su sistema es inocuo, deberían de ofrecer junto a sus antenitas un seguro de responsabilidad civil que cubra los daños a la salud vecinal y al medio ambiente.
«¿Y qué pasa con los niños?». En teoría la radiación electromagnética les afectará más pues adolescentes y niños, con tejidos en desarrollo, como el nervioso, son más vulnerables a cualquier tóxico, y la radiación electromagnética es genotóxica. A este posible riesgo en potencia, hay que sumar el abuso que de esta tecnología se realiza a estas edades, y no es de extrañar que en el futuro próximo se asocie a fracaso escolar; algunos investigadores aconsejan su prohibición en menores de 16 años. Añádase al coctel electromagnético del hogar (en suma y sigue), la proliferación de la tecnología wireless fidelity (wifi), conexiones sin cables, y sistemas de comunicación de voz/datos tipo Bluetooth, PDAs, WiMax? que utilizan campos electromagnéticos de frecuencia similar o mayor que la telefonía móvil. En París y en Salzburgo, por ejemplo, se han establecido moratorias (aplazamientos) para la implantación de wifi en bibliotecas y museos, y así proteger la salud de los más jóvenes («principio de precaución»). Por esta geografía, sin embargo, siguen proliferando estos sistemas, a la vez que aumentan las personas hipersensibles a la radiación electromagnética.
Los datos negativos, que algunos todavía dicen que no existen, siguen apareciendo, como los caracoles tras la lluvia. Así, recientemente (2008), se ha demostrado que la radiación de la telefonía móvil altera la expresión de proteínas en la piel humana (BMC Genomics), tiene efectos neurobiológicos al modificar los parámetros de atención y memoria (Occupational and Environmental Medicine), o su firme asociación con tumores (malignos y benignos) de la glándula paratiroides (que controla calcio y fósforo sanguíneo) (American Journal of Epidemiology). Otro reciente informe (BioInitiative Report) señala que los efectos biológicos sobre la salud de este «invento», ya ocurren a niveles de exposición muy bajos, miles de veces por debajo de los actuales «límites públicos de seguridad».
Y para finalizar, una sorpresa más, en Julio aparecerá en la revista Epidemiology el primer trabajo sobre la exposición prenatal y posnatal a la telefonía móvil, realizado por investigadores de las Universidades de California (EE.UU) y Aarhus (Dinamarca). Los científicos centraron su estudio en analizar si tras la exposición en el seno materno a la radiación electromagnética (telefonía móvil), existían en los jóvenes (a la edad de 7 años) problemas de comportamiento. Y después de estudiar más de 13.000 niños, concluyen que los expuestos prenatalmente (y en menor medida los postnatalmente) tienen problemas emocionales y de hiperactividad.

 

 

 

 

 

 

El Ayuntamiento impulsa la moratoria sobre las torretas de telefonía móvil

J.Darriba
Las Palmas de Gran Canaria

El Pleno del Ayuntamiento aprobará este mes la suspensión de licencias de antenas de telefonía móvil, una orden que entrará en vigor cuando sea publicada por el Boletín Oficial de Canarias. Desde entonces se abrirá un plazo de un año en el que la concesión de licencias para instalar torretas estará congelada.

La Junta de Gobierno de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria -el máximo órgano colegiado de dirección política- aprobó ayer el expediente de suspensión de otorgamiento de licencias para las antenas de telefonía móvil. «Durante un año no va a haber nuevas licencias de telefonía móvil», aseguró el director del área de gobierno de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Vivienda, Carmelo Padrón.
El Pleno dará el carácter oficial a la decisión el próximo viernes y el plazo empezará a contar desde que se publique la orden en el Boletín Oficial de Canarias. Desde ese momento, además se congelarán las licencias cuya tramitación se hubiera iniciado en los tres meses anteriores.
La intención del Consistorio es ordenar el panorama de las antenas de telefonía móvil. Para eso, se ha encargado un estudio a la Fundación Universitaria y se prevé cambiar la ordenanza municipal reguladora de las instalaciones de radiocomunicaciones. «Se trata de determinar el problema de la telefonía móvil y hallar la solución óptima» para poder compatibilizar servicio y seguridad.
En estos momentos, el espacio radioeléctrico está prácticamente saturado, según anunciaron las operadoras de telefonía móvil en una reciente reunión mantenida con el Ayuntamiento capitalino. En la capital, volvió a recordar ayer el responsable del área de Urbanismo, hay más móviles que vecinos.



Con vecinos. Junto a la Fundación Universitaria, el Ayuntamiento quiere que también participen en la elaboración del diagnóstico de situación los técnicos del Cabildo de Gran Canaria -que participaron en un plan territorial inconcluso sobre las antenas de telefonía móvil- y los letrados que asesoran a los vecinos que han llevado hasta los tribunales la lucha contra este tipo de instalaciones.
Carmelo Padrón no quiso adelantar el camino que seguirá la Fundación Universitaria en su estudio. «La solución técnica no la voy a adelantar», explicó, «el equipo técnico será el que determine la solución para el servicio porque todo el mundo quiere que exista este servicio».
El director de gobierno tampoco quiso dar pistas sobre si lo óptimo es concentrar las antenas en un determinado punto o bien optar por la atomización.
«Se trata de cómo prestar el servicio de telefonía móvil con el menor impacto físico y psíquico para los vecinos», concluyó Carmelo Padrón.

 

 

 

LA CIUDAD CORTA LA EMISIÓN DE UNA ANTENA DE TELEFONÍA SOBRE UN COLEGIO



Un segundo caso de enfermedad grave (Leucemia, cáncer de sangre, linfoma, y cáncer del sistema linfático, a finales de diciembre de 2007, en dos niños de 10 años, de la clase situada en el 2º piso del colegio, a tan solo, unas decenas de metros de una antena de telefonía móvil situada en la terraza de un tejado contiguo), en el seno del colegio de primaria Víctor Hugo (1er. Distrito), lleva a la ciudad a solicitar la interrupción del funcionamiento del operador de telefonía móvil para responder a la angustia de las familias.

“Desde la vuelta al colegio en enero los padres están muy inquietos”. Reconocía ayer por la tarde Marie France Acario, directora de primaria del Víctor Hugo.
“Puesto que aunque no se pueda demostrar, se ve forzosamente una relación”
En el seno del colegio situado en el callejón Flessselles en el 1er. Distrito, el conocimiento de un nuevo caso de cáncer, esta vez, a un alumno de CE2 que además está en la misma clase del 2º piso que el anterior caso declarado, ha reavivado los temores de los padres. Desde el pasado viernes, estos últimos, se han movilizado como nunca, con el apoyo y determinación de aquellos que anteriormente no fueron escuchados.
En 2006, en efecto, el consejo escolar había solicitado la NO renovación y retirada de las antenas que “adornan” el tejado de la escuela primaria. La ocasión se presentó con la llegada del vencimiento o finalización del convenio de ocupación atribuido por la ciudad a SFR, sobre este emplazamiento.
En noviembre del mismo año, la renovación era un hecho. Antes esto, se han producido varias reuniones de información en presencia de la empresa SFR y del Dr. Rittez, director de Ecología Urbana, en las que acordaron reducir las medidas de las emisiones bien por debajo al umbral de exposición máxima de 41 voltios/metro. Dichas medidas no convencieron en absoluto a los padres de los alumnos.
Ellos proponían la aplicación de las normas mas estrictas, adoptadas por el Parlamento Europeo, y por algunas colectividades territoriales: “Una red puede funcionar con una intensidad limitada a 0’6 voltios/metro. Se pide a la empresa concesionaria que adopte sus responsabilidades haciendo bajar la emisiones a la normativa en vigor, y aceptar ser informados por otras fuentes que las *oficiales*, mas aún cuando recientemente se pone en duda La Independencia, de los expertos”, Señalaba en junio de 2006 (Le Progres du 06/06/2006) Natalie Allochon, Secretaria del Consejo de Padres de Alumnos del Colegio Víctor Hugo.
Los padres quieren hablar con el Alcalde de Lyón.
Hoy aunque se opta por un principio de precaución la ciudad recuerda que las gestiones emprendidas por el Alcalde de Lyón Gerard Collomb, en octubre de 2006, junto con el Ministerio de la Salud y del Primer Ministro, y con la Comisión Europea, están todavía sin respuesta, lo cual motiva cierta desconfianza sobre la validez de las normas aplicadas.
Por su parte Benito Licour, director de Relaciones Exteriores de SFR, mantiene la conformidad sobre las intensidades emitidas por sus estaciones de Antenas de Telefonía móvil.
A la espera de confirmar los rumores, ayer por la tarde, en el seno del colegio Víctor Hugo, se planteaban las siguientes movilizaciones: Una declaración de la escuela mortal para el martes 5 de febrero. Se planteaba por parte de los profesores llevar a cabo un día de huelga el próximo jueves 7 de febrero, y un encuentro con el Teniente Alcalde Yves Fournel, Delegado de Educación y Silvia Guillaume, Delegada de Salud, que tendrá lugar el viernes.
Solo queda concretar, que los padres desean hablar a partir de ahora directamente con Gerard Collomb “Es delante de él donde nosotros queremos exponer nuestros argumentos con el fin de saber si la interrupción del funcionamiento de la antena solo es un gesto meramente electoralista o si hay detrás un trámite más metódico en todo este asunto”, Confiaba ayer por la tarde el padre de un alumno.
Dominique Menvielle
dmenvielle@leprogres.fr


“NINGUNA RELACIÓN CON UN RIESGO SANITARIO”
 

“Esta decisión ha sido tomada, de acuerdo con el Ayuntamiento de la ciudad de Lyón, con el solo objetivo de apaciguar, para restablecer un clima de serenidad en el colegio Víctor Hugo”. Para SFR, “el corte de emisión de esa antena no está en absoluto ligado con el reconocimiento de un riesgo sanitario. Las autoridades sanitaria públicas, tanto en Francia como a escala internacional, descartan la hipótesis de riesgos para la salud de la población que vive en la proximidades de antenas de telefonía móvil, teniendo en cuenta los débiles niveles de exposición constatado”, insiste Benoit Licour, director de relaciones exteriores de SFR Centro-Este. Ha aprovechado la ocasión para recordar que el Ministerio de la Salud precisa que “todos estos grupos han deducido que, según los conocimientos científicos actuales, y teniendo en cuenta los débiles niveles de exposición a los campos electromagnéticos alrededor de las antenas, no puede seguir manteniéndose la hipótesis de un riesgo para la salud de la población que vive próxima a las estaciones”.
“La Organización Mundial de la Salud es de la misma opinión, señala el portavoz de SFR, e indicaba en mayo de 2006 que “teniendo en cuenta los muy débiles niveles de exposición y los resultado de los trabajos de investigación obtenidos hasta ese día: No existe ningún elemento científico que pruebe o confirme eventuales efectos nocivos de las estación de base o de las redes inalámbricas, para la salud”.
Las mediciones realizadas de los campos electromagnéticos en el colegio Victos Hugo han mostrado unos niveles muy inferiores a los límites reglamentarios en vigor. G.M.

 
Una carta de buena conducta
 

La “Carta de las Estaciones de base de telefonía móvil” realizada en mayo de 2002, entre la ciudad de Lyón, y los tres operadores Bouyges, Orante y SFR, trata sobre la implantación de “nuevas estaciones de base y de las condiciones de utilización de las estaciones ya existentes”, con el fin de que aquellas “sean garantes en el respeto de los principios de información, de concertación, de transparencia, de salud pública y de precaución”. Emplazamiento y características (gamma de frecuencia, orientación del haz) de la antena, compromiso de respecto de los valores límite de exposición al público, tales como los definidos por la recomendación europea del 12 julio de 1999. El documento es accesible a través de la página Web del ayuntamiento de Lyón, y obliga a los operadores a “poner en marcha la tecnología que produzca los niveles de emisión lo mas bajo posible compatible con la calidad del servicio”. La misma formula que en el decreto de mayo de 2002, al que la carta lionesa hace referencia y que exige que los operadores aporten las pruebas de “acciones y compromisos para asegurar que en el seno de edificios como colegios o guarderías, así como edificios de asistencia médica que estén situados en un radio de cien metros de las instalaciones de antenas de telefonía móvil, la exposición del público a los campos electromagnéticos emitidos por las misma sea lo más débil posible, pero siempre preservando la calidad del servicio prestado.

La OMS se pronuncia sobre los impactos de los campos electromagnéticos